Úrsula Corberó, actriz española internacionalmente conocida por La casa de papel o Física o química, se lanza al nuevo reto de protagonizar la serie El cuerpo en llamas, un “true crime” que recrea el llamado “crimen de la Guardia Urbana” donde interpreta a la asesina Rosa Peral, que aún cumple condena.En declaraciones a EFE, Corberó aseguró este miércoles que …
Úrsula Corberó entre la presión y el respeto con el “true Crime” de ‘El cuerpo en llamas’
Úrsula Corberó, actriz española internacionalmente conocida por La casa de papel o Física o química, se lanza al nuevo reto de protagonizar la serie El cuerpo en llamas, un “true crime” que recrea el llamado “crimen de la Guardia Urbana” donde interpreta a la asesina Rosa Peral, que aún cumple condena.
En declaraciones a EFE, Corberó aseguró este miércoles que no tuvo más remedio que enfrentarse a este papel “con mucho respeto y con un poco de presión también”, pero sobre todo “con mucho control del ‘frikismo’”, ya que encarna a una persona que está viva y en la cárcel, y a la que todo el mundo ha visto en la televisión hace solo unos años.
Para saber dónde se metía, Corberó contó que se reunió muchas veces con Netflix, “les hacía muchas preguntas, lo comentaba con la almohada, al día siguiente me venían a la cabeza nuevas preguntas”, hasta que después de “un mes de idas y venidas”, al final dijo que sí, consciente, no obstante, de que “había mucho riesgo”.
UNA HISTORIA CRUEL
La serie, presentada hace unos días en Madrid, cuenta en ocho capítulos adictivos el asesinato premeditado de un guardia urbano de Barcelona (España) a manos de la que era su pareja y el amante de ésta, una historia real macabra y cruel que recoge El cuerpo en llamas.
“Había una delgada línea que se tenía que encontrar, eran unos personajes un poco de barrio, pero con una propuesta estilística elegante”, abunda la actriz, que transita en la serie por varias “Rosas”: la go-gó choni de una discoteca de barrio, la chispeante compañera policial, sexy y desinhibida, o la madre tierna y juguetona.
Dirigida por el español Jorge Torregrosa con guión de su compatriota Laura Sarmiento, El cuerpo en llamas engancha desde el minuto uno, a pesar de contar unos hechos reales que ocurrieron entre 2017 y 2020 y fueron muy mediáticos.
Pero tanto Corberó como el actor español Quim Gutiérrez y el resto del reparto logran dar cuerpo a unas vidas bien difíciles de comprender, salvo, como es el caso, que les veas evolucionar.
Gutiérrez explicó a EFE que “todo el rato” estuvo forzándose para recordar que aunque su personaje estaba inspirado en hechos reales, era ficción.
En la historia se mezclan diferentes ingredientes, como el hecho de pertenecer a un cuerpo policial, apuntó Gutiérrez, impecable en el cuerpo de un guardia urbano curtido de gimnasio (ganó ocho kilos de músculo para el rodaje) y con la mirada justa de amante apasionado o monstruo capaz de cualquier cosa.
ENTENDER AL PERSONAJE
Para el actor, lo más difícil era comprender por qué “al final, ante estas circunstancias, la única salida posible es la muerte del tipo que molesta. Había tantas opciones, se podían hacer tantas cosas. ¿Por qué la única opción es cargártelo? Ésa era para mí la gran duda, porque los personajes no son psicópatas”.
Destacó la importancia de la violencia en la serie, pero no solo la que se ve en la trama, sino la que probablemente les había rodeado antes, “cuando se generan las personalidades y los rasgos de carácter”.
Los celos, la posesión, el carácter violento de este hombre que, además, es policía y ególatra, un “macho” convencido de que “siempre va a ser el novio de Rosa”, revientan en un momento que luce más aún en los últimos capítulos de la serie, cuando se recrea el juicio que los enfrentó, escenas que son las favoritas de la pareja de actores.
Se sabe que son dos personas malvadas, aportó Corberó, pero “¿de dónde viene esa maldad?”.
“Me interesaba mucho meterme ahí porque sentía que todo lo que sabía la gente del caso era como quedarse en la primera capa de la cebolla (…) Quería que el espectador, como yo fui entendiendo cosas del personaje mientras rodaba, también llegase a sus conclusiones”, añadió.
Tras la emisión de la serie, disponible al completo desde el 8 de septiembre en Netflix, la plataforma ha programado un documental en el que ha participado la propia Rosa Peral, quien ha intentado que se impidiera la emisión de su historia ficcionada, sin éxito, ya que los jueces no han admitido su petición.