A 13 años de la muerte de Samuel Ruiz, Obispo Emérito de la Diócesis San Cristóbal de las Casas, el sociólogo Antonio Flores, quien lo conoció en sus últimos años en Querétaro, recuerda su legado mucho más allá de la religión, sino en el mundo social y las organizaciones políticas.QUERÉTARO.- Samuel Ruiz García fue una …
El legado de j’tatik Samuel Ruiz a 13 años de su partida
A 13 años de la muerte de Samuel Ruiz, Obispo Emérito de la Diócesis San Cristóbal de las Casas, el sociólogo Antonio Flores, quien lo conoció en sus últimos años en Querétaro, recuerda su legado mucho más allá de la religión, sino en el mundo social y las organizaciones políticas.
QUERÉTARO.- Samuel Ruiz García fue una persona que pudo “transformar” las relaciones entre las comunidades indígenas de Chiapas y la Iglesia Católica, además de constituir “una iglesia intercultural” en la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, al “asumir”, respetar y posicionar “el pensamiento y la forma indígena” en su labor, consideró Antonio Flores González, quien colaboró con el Obispo Emérito entre 1992 y 1993.
Entrevistado con motivo de hacer un análisis del trabajo que distinguió al Obispo que falleció el 24 de enero de 2011, Flores González destacó que “gente como Don Samuel, en instituciones tan importantes como la Iglesia, sí son muy importantes para la transformación de esas relaciones”, además de enfatizar el trato que le dio a habitantes indígenas y los diálogos “horizontales” que construyó.
“La primera vez que lo conocí fue porque me mandaron a llevar unos papeles a la Diócesis, a la catedral, y se los tenía que entregar a él. Entonces fui a darle los papeles y estuve esperando, porque él estaba reunido con unas personas indígenas. me sorprendió porque estaba hablando Tzeltal, una lengua indígena (…)
“A mí me impactó mucho eso ver a un Obispo muy acá, hablando una lengua indígena, sentado y cotorreando con la gente, en ese momento no tenía atuendo [religioso] hasta eso también es la horizontalidad y después del trabajo intenso (…)
“Trabajaba desde muy temprano, hasta la noche estaba en reuniones laborando y recibiendo gente, atendía a todo el mundo”, recordó Antonio Flores, quien llegó a Chiapas en 1992, antes del levantamiento del EZLN en enero de 1994. El exsecretario Académico de la FCPS estuvo principalmente en Comitán.